Mensaje del 21 de diciembre de 2022 – 5:45 am

Niña de Mi Corazón, te he llamado en esta Aurora para dejaros sentir junto conmigo, el desconsuelo de Mi Corazón por una humanidad adolorida pero indiferente, una humanidad agobiada más despojada de Mi Amor, una humanidad vacía, rodeada de mucho pero con la mayor pobreza en sus corazones.

¡Oh! Cuánta desolación de Amor siente Mi Corazón traspasado que Os espera y no recibe respuesta.

Cuánta distracción que Os ha envuelto y Os enceguece, Os ensordece, Os aparta; estáis caminando en un letargo, sumidos en un consumismo sin fondo que Os está apartando de vuestra condición perfecta en la creación como hijos de Dios, porque estáis pasando de largo sin posar la mirada en el Padre, sin la exclamación del Hijo, sin la fuerza viva del Amor en vuestros corazones.

¡Oh! humanidad adormecida, que se ha dejado enlodazar por las apariencias del mundo,

¡Oh! Humanidad sorda, que no quiere escuchar Mi Voz,

Mi Corazón grita en el desierto, Os anuncia el llamado y vosotros hijos Míos, no escucháis Mi Corazón.

¡Oh! Cuánta espera en el Corazón del Padre,

Cuánto anhelo en la fuente del Amor del Hijo y cuán habido de entrega el Espíritu Santo, más vosotros despreciáis el Amor, estáis creyendo que vuestros tiempos, vuestros actos, vuestras ocupaciones están rodeadas de Amor, más Yo Os digo, no existe Amor Verdadero sobre la tierra, que no esté posado sobre Mí Corazón;

Vosotros, estáis caminando en la apariencia de un Amor mundano, que Os confunde, que Os engaña, que Os aparta de Mí, y Mi Corazón esta triste, se mantiene a la espera, Os llama, más Mi Padre en la espera del Amor de sus hijos, se colma en Divina justicia y su corazón se estremece de Dolor; no podéis entender este misterio hijos míos, mas Yo Os digo:

Deteneos ahora, despojaos del letargo de vuestras almas, aclamad a Mi Corazón y Glorificad al Padre por vuestra liberación, porque la humanidad entera será sacudida, será pesada y medida, y vuestro corazón padecerá; debéis reconciliaros con Mi Amor, debéis Orar, sin descanso hijos Míos, mirad que el enemigo de vuestras almas, “satanás” Os está llevando al tiempo del olvido, al tiempo del desierto, al tiempo de la confusión, al tiempo de la discordia, Os está engañando y vosotros Os dejáis engañar,

Mirad que sois pequeños y vuestros corazones están vacíos si Mi Amor,

Mirad que estáis tristes y vuestras almas solo se sacian con Mi Amor,

Mirad que estáis infinitamente solos, aún rodeados de muchos, y solo Mi Amor despojara vuestra soledad,

Mirad hijos que no tenéis esperanza y Yo Soy la Esperanza misma,

Mirad hijos que os estáis desfigurando en seres mecánicos, en autómatas programados, y no Os estáis dejando pensar, sentir, amar, acaso no estáis vivos, acaso no está latiendo vuestro corazón, pues Yo Os digo, camináis como muertos vivientes sin amor,

¡Oh! Cuánto Dolor siente Mi Corazón por esta humanidad doblegada y detenida en la inmundicia de la apariencia, del desprecio a lo Divino y la esclavitud a lo terreno,

¡Oh! Cuánta desolación a Mi Corazón herido y Cuánta Fuente de Amor incontenible que Quiero daros a cada uno de Mis Hijos, sin excepción de ninguno, porque Os Amo;

Os digo ahora, dejadme Reinar en vuestros Corazones,

Dejadme reposar allí para descansar,

Mirad que el tiempo corre y Mi Corazón Os llama,

Mirad que Os quiero en el Aposento de Mi Madre junto a Mi Padre San José,

Mirad que la mirada del Padre se ha posado en la justicia y Os dolerá su encuentro,

Mirad que el despojo no puede esperar, es el tiempo, es ahora, es en el llamado y la respuesta inmediata de vuestros corazones vacíos, necesitados de Amor,

Mirad que hace frío y se acrecentará,

Mirad que solo el Calor de Mi Amor Os apaciguara,

Mirad hijos las señales, porque el llamado permanece, más no vuestra respuesta y Yo Os quiero en la respuesta de Un “Si”, Ven a nacer en Mi Corazón Niño Jesus, despójame y prepárame para reposar en mí y que yo pueda ser cuna de Tu Amor, Ven a nacer en Mi Niño Jesús, Eternamente, para ser uno contigo en el Verdadero y Único Amor del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén”.

Así Os quiero hijos Míos, en el regazo de Mi Amor, Os llamo una vez más desde el Dolor de Mi Corazón. Os Amo niña de Mi Corazón. 6:17 am