Mensaje del 17 de julio de 2024. 4:08 am

Escribirás una vez más hija Mía, en el despertar de la aurora, como el despertar del Amor que es Mi Corazón mismo, escribirás en la compañía de Mi Amor solitario y dirás:

¡Oh hijos Míos, que no conocéis Mi Amor, ni la profundidad de Mis Bienes, que permanecéis ensordecidos y desordenados por vuestra propia racionalidad.

¡Oh! Hijos Míos, que divagáis por cada camino buscando un encuentro de Mi Amor, que Os lleve al “Remanso de la Paz”, y que buscáis en lugares efímeros y equivocados. 

¡Oh! Hijos Míos, que sondeáis la tierra para enlodazar la pequeñez de vuestro existir y permanecéis atónitos ante el Espíritu, sin conocer la Verdad de Mi Amor; pues bien hijos Míos, Os digo en esta aurora como a tu corazón de niña, silenciaos y escuchad, cuan amoroso es Mi Corazón, que no se sacia en daros amor, sino que se vacía diariamente en la entrega de la Cruz, ofreciendo Mi Propio Sacrificio de Amor por vosotros, en la redención de vuestro corazón, que se hizo carne en el cuerpo de Mi Madre “Llena de Gracia”, y que dio vida al Cuerpo Santo entregado en la Cruz, derramando hasta la última gota de Sangre, que se hizo holocausto de Amor para restauraros en el Vino Nuevo del Amor, que Soy Yo mismo.

Cuan insondable es Mi Corazón, que se hizo donación de Amor, en el encuentro del tiempo con la Eternidad, para otorgaros el Pan y el Vino, que es el alimento propio de vuestro respirar y que renueva el halito de Mi Padre en cada creatura, que con verdadero amor lo recibe; cuan inconcebible Amor que Os Ama en el constante Sacrificio, que por cada pecado vuelve a ofrecer como una fuente permanente de Misericordia; porque no habéis comprendido que Soy el Maná de vuestro propio desierto, que se poso y donó en la tierra para saciar vuestra hambre y vuestra sed.

El Amor mismo que en el Verbo restauro en cada ser, el “Hágase en Mí, según Tu Palabra” pronunciado por Mi Madre, y que se renueva en los altares de manera continua y permanente para sostener el Universo.

¡Oh! Cuan devastador Amor, que no es escuchado y Amado y Os sigue Amando, un Amor Perfecto que es el Verbo de Mi Propio existir, que viene a unirse a vuestro imperfecto Amor, aun a pesar de vuestra soberbia y necedad, un Amor que Os encuentra en el camino, Os llama y Os busca, pero que dejáis pasar de largo por manteneros apegados a los vacíos de la tierra, los que son apego al mundanismo, la banalidad y la vanagloria.

¡Oh! Eterno Amor que encierra la Palabra hecha vida para vuestra Salvación, y que os llama en el silencio para que en vuestra voluntad le dejéis reposar, para descansar en el encuentro y saciaros; como el Pastor que ha encontrado la oveja perdida y que como Padre la carga y la acoge en Sus Brazos, para custodiarla y protegerla del peligro del mundo que quiere poseer vuestro corazón con engaños y ataduras de perversión y maldad.

¡Oh! Amor, que es silencio perfecto que penetra vuestra alma y Os colma de paz, que Os habla en el silencio y Os dirige por caminos de servicio y entrega filial, en la donación de cada alma que quiere acompañar Mi Sacrificio en la Cruz. ¡Oh! Amor, que Os Ama, aún en la incomprensión de vuestro propio corazón.

Os digo hijos Míos, cada uno de vosotros es Mi Amor mismo, por ello Os llamo y Os espero, y por ello, se restablece el Amor mismo de la creación en vosotros, cada vez que pronunciáis un Si de Amor, un Sí de Encuentro, Un Sí de Beneplácito, para dejaros Amar y para Amar; estáis posados en un mundo opacado en el Amor, negado al Amor, un mundo que rechaza Mi Amor engañando vuestros corazones con una imagen de amor humano tergiversada, malversada en la irracionalidad, la dependencia material, y la negación del pecado; un Amor que no es Amor, sino que se disfraza de Amor, siendo en verdad odio del mal al Verdadero y Único Amor que Soy Yo mismo.

Os digo entonces hijos Míos, mirad vuestro corazón, como miráis vuestro alrededor, en un mundo saciado de vanidad, lujuria, venganza, ansias de poder, perversión, inmoralidad, violencia, inmodestia, capricho, egocentrismo, individualismo, indiferencia, odio, ansias de poder, un mundo dominado por la maldad, sirviendo al mal en todo su esplendor; ¡Oh! Hijos Míos, un mundo sin Amor, más Mi Corazón que quiere saciaros, Os llama al Amor, por eso Os grita Mi Corazón “Venid a Mí, los que están cansados y agobiados, que Yo Os aliviaré”; y vosotros estáis retardando ese encuentro voluntariamente en una espera incierta de dolor, en una espera que a gritos Os llama y que Os pide apresuraros en vuestro Sí de Amor, porque el enemigo vive como león rugiente en medio de vosotros para apartaros de Mi Amor, y vosotros complacidamente permanecéis indiferentes a Mi llamado y a la Espera de Mi Corazón.

Os digo una vez más en esta aurora. Mi Corazón que Os Ama Os sacia, “Venid al encuentro de Mi Amor”.

Hija Mía, Mi Corazón te Ama y permanece en tu corazón, sed dócil a Mi Voz junto a Mi Madre, en la compañía de Mi Corazón solitario, Mi Corazón que no es Amado y que espera por cada uno de Mis Hijos. Os dejo en la Paz de Mi Amor. 4:51 am