Oh Cruz de Amor, que te levantas en el Heroísmo de la Entrega, y te sumerges en la Soledad de Tu Propio Corazón.
Oh Cruz de Amor, que apacientas los Corazones Soberbios, desafiando al hombre con Tu Victoria y restringiendo el Poder de Satanás por Tu Entrega y Enmienda ante el Padre Eterno.
Oh Cruz de Amor, que te engrandeces en la Pobreza del Corazón de los hombres, y que noble y sublime calmas las tempestades.
Oh Cruz de Amor, que emanas la Paz del Corazón y despejas la duda, el desamor, la infidelidad.
Oh Cruz de Amor, inagotable en Gracias, que imponente callas y despiertas a los hombres con tu grito de Salvación.
Oh Cruz de Amor, que te haces Sangre y Agua para limpiar la suciedad de los hombres y que sondeas sus corazones con el Bálsamo del Dolor.
Oh Cruz de Amor, que Reinas entre los hombres y nos llamas al Encuentro de Tu Único, Poderoso y Hermoso Reino de Amor.
Os Cruz de Amor, que permaneces latente, gimiendo en la Espera de las Almas y rogando por el hijo prodigo que no llega.
¡Oh Cruz!, ¡Oh Cruz!, ¡Oh Cruz!, que nos Amas y que Esperas en silencio nuestro Amor, sin respuesta viva por nuestros corazones adormecidos.
Oh Cruz toda Bella, Plena e Inigualable, que sacia el Corazón del Padre y nos Redime de la Culpa con Su inmenso Amor.
Oh Cruz de Amor, que enamora el Alma y que llama al Desierto. Perdón Oh Cruz de Amor, Perdón, Eternamente Perdón