Escribirás hija Mía, niña de Mi Corazón, en la compañía de Mi Amor y dirás en lo profundo de tu alma:
“Cuanto Amor de Tu Corazón Amante Jesús, reposa en mí, de manera tan profunda y real, que se desborda como un Torrente de Agua Viva y que fluye siendo Gracia Santificante para mi corazón, dejadlo entonces avanzar como un cántaro de agua, que se vacía para saciar la sed de cuantos me rodean; cuanto Amor, que sana y sacia y que libera mi alma sedienta para contagiar también a las almas de este inigualable y placido amor; cuan insondable sentido de Amor que se desborda para purificar y que permanece insaciable por donarse para cada alma”.
¡Oh! Amor Insondable que Mi Corazón Os otorga, ¡Oh! Amor Paciente que Mi Corazón Os quiere dar, ¡Oh! Amor Apacible que en la espera Os quiere cobijar, ¡Oh! Cuánto Amor Excedido, que sin palabras se expresa y se reposa en Mi Cruz, ¡Oh! Amor insuperable, que, en la expiación de las almas, se revive en el Altar del Madero, ¡Oh! Amor desmedido, que renace en el Corazón de Mi Padre, para hacerse Uno con vosotros por la Redención de Mi Corazón.
¡Oh! hijos, a quienes Os Amo y Os Espero, Os digo con profundo Amor, “Dejaos Amar por Mi Amor, que tanto Os Ama”, ¡Oh! hijos que estáis perplejos por la desolación de vuestras almas, venid al encuentro de Mi Corazón y abandonaos en Mi Amor, que tiene ansias de Amaros.
¡Oh! pueblo de Mi Corazón, que anhelo en el silencio y que llamo al encuentro, mirad Mi Corazón rebosante de Amor, que quiere darse en plenitud para apaciguar los corazones y que jamás se niega en generosidad. ¡Oh! Pueblo insaciable, que buscáis amorres perversos y Os dejáis enceguecer por vagos momentos de mentira invadidos de desamor, ¡Oh! pueblo Mío, que Espero en el ensueño de Mi Amor caminando hacia el Rebaño de Mi Corazón. ¡Oh! Pueblo Mío, que estáis sordo y ciego, dejaos tocar por Mi Amor, que Os grita desde lo profundo y que Os quiere revivir en el Amanecer de Mi Amor, en el regazo de Mi Corazón.
Os digo, niña de Mi Corazón, permaneced en Mi Amor, permaneced en el Amor de Mi Madre y esforzaos por consolar Mi Corazón en el esfuerzo de tu pequeña alma, renunciando a ti misma, para servir a Mi Corazón desde las entrañas de Mi Propio Amor.
Os Amo, sed valiente y paciente y mantened tu corazón inquieto en el silencio, en la compañía de Mi Amor en tu pequeño corazón. 4:51 am