Mensaje del 29 de agosto de 2019 6:40 pm

Santísimo de la Parroquia Virgen de Altagracia en Curazao

El Señor me dice, antes de escribir las palabras de Su Corazón:

Que debo orar en reparación por cada Comunión en el mundo entero, para que Su Cuerpo y Sangre, sea:

Divinamente Alabado
Glorificado
Tiernamente Querido y Esperado
Puramente Recibido
Contritamente Acogido
Sublimemente Contemplado,
en el Corazón de cada ser que lo reciba, en cada hora y en cada rincón del mundo.

El Señor me dice:

Ahora Hija, escribirás las Palabras que desde el Señor de Mi Madre se han otorgado para Ti, porque como un resplandor de Amor en la Gracia de la cuna de Mi Amor, Mi Madre te acoge hija y te acompaña como te acompaña Mi Corazón.

La Santísima Virgen María dice:

Hija Mía, Mi Corazón de Madre que cuida, que también anuncia, y que cobija las plegarias de cada uno de Mis Hijos, hoy te anuncia en el Amor de Mi Hijo, también la compañía en el sufrimiento ante las Blasfemias y Ultrajes de Su Corazón; por ello, debéis manteneros unida a la Voz de Mi Hijo en el Sagrario.

Sí Hija, la Voz que clama como en un Desierto diciendo:

Aquí estoy Hija Mía
Ven a Mi Corazón que te anhela, y no dejes que llegue el ocaso sin que tu voz y tu mirada me acompañen.
Ven Hija Mía, dulce compañía, que espero para ser huésped de tu alma y mantener en ti la llama de Mi Amor encendida por Tu Amor.
Ven Hija Mía, acompaña la soledad de tus días, así como tantas veces la desesperanza.
Ven Hija Mía, déjame que sacie tu espíritu con tu corazón enaltecido de Amor por Mi Amor

Así Hija Mía, acompañaras la Voz de Mi Hijo, en cada instante que traigas Su Mirada Sacramentada a tu corazón, entonces lo acompañaras y deberás ofrecer estas palabras de amor por toda la humanidad, suplicando la Justicia en la propia Bondad y Misericordia del Hijo, porque el Padre Hija Mía, en Su Sabiduría Eterna, no permitirá que pase mucho tiempo sin reprender a la tierra.

El pedirá la cuenta por cada insidia del Enemigo en el hombre, por cada flagelación del Corazón de Mi Hijo, por cada negación y desobediencia de todos los seres que habitan la tierra.

Es tiempo de fuerza en la Fe, más, es tiempo de prueba y sufrimiento, y se mantendrá por largo tiempo en vosotros; más como un abrir y cerrar de ojos en el tiempo del Padre.

Vosotros Hijos, sois participes del Amor en todo su Esplendor, cada vez que disponéis vuestro corazón; más también grandes infieles podéis llegar a ser Hijos, cada vez que desobedezcáis ante el Amor Verdadero de Mi Hijo.

Entonces obrad también en concordancia con el pedido de Mi Corazón, sed corazones reparadores unidos a Mi Corazón Inmaculado y obrad en pos de este tiempo, en el silencio y en la constancia en la oración, porque junto al Padre espera el Hijo y cada súplica, por pequeña que sea, es oración multiplicada por Mis Manos en el Cielo.

Os abrigo Hijos, como a ti Hija te acompaño, sed entonces dócil una vez más a esta pequeña prueba de Amor, en la compañía del Corazón de Mi Hijo.

Os dejo Hija Mi Paz, y Os doy las gracias, por atender la Voz de Mi Amor en tu corazón, como siempre acoges la Voz de Mi Hijo.

Os Bendigo Hija, en el Nombre del Padre, en el Nombre del Hijo y en el Nombre del Espíritu Santo. Amen. 7:00 pm

MI AMADO JESÚS – MAMITA MARÍA