Mensaje del 28 de Junio de 2018. 7:00 pm. Santísimo

Oh Amada Humanidad, Amados hijos del Amor de Mi Padre, Os digo en esta hora, que Os duela el corazón, que Os duela el Alma, con verdadero arrepentimiento y humillación,

porque Os he llamado tanto y de tantas maneras y vosotros hacéis oídos sordos a Mi Voz; pues bien hijos Míos, la parsimonia de la fe Os dolerá, como Os dolerá la tibieza y vuestro corazón también padecerá, porque habéis dado gritos de júbilo en el mundo por las banalidades del mundo, más no habéis dado gritos de júbilo por Mi Amor.

Hijos Míos, no entendéis, no sabéis el Dolor de Mi Corazón, y cuando lo reconozcáis, entonces vuestro corazón sufrirá y se sofocará en desconsuelo; porque Os he llamado y no habéis querido escuchar, porque Os he esperado y no habéis querido venir a Mí y porque Os he Amado y vosotros me habéis dado la espalda para amar el mundo en sus efímeros sentidos.

Hijos, Yo Os acojo cuando regresáis con amor, por eso Os digo, es corto el tiempo más infinita es la espera por cada corazón, no esperéis a que el llamado de Mi Voz Os tome por sorpresa y no estéis en el camino, debéis saber, que la alegría del Encuentro se posa en la Paz y el regocijo del Alma por Mi Amor y si Os encuentro vacíos entonces ¿A dónde iréis?

Hijos Míos, ya no Os llamo siervos sino Amigos, y por ello he dado Mi Vida por vosotros, entonces regresad, porque el Patíbulo de Amor Os clama y grita por cada uno de vosotros, más no dejéis entonces, que se enmudezca el grito de Mi Amor en el desierto y apresurad vuestro regreso, porque pronto Oscurecerá la luz y vuestros ojos mirarán al que Traspasaron, y en vuestro corazón arderán llamas de dolor. Escuchadme hijos que Os llama y Os espera Mi Corazón.

Bendecid hija Mía, cada Corazón que por su amor regrese a Mi Corazón, porque cada Alma de regreso al Rebaño, es la Glorificación del Amor Eterno en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, y clamad a Mi Madre, la intercesión de su Inmaculado Corazón en la multiplicación de cada conversión por el Honor de Mi Nombre.

Continuad hija Mía la tarea del Amor, y donad vuestro Amor como Os infunda Mi propio Corazón. Gracias niña de Mi Amor, por atender el llamado de Mi Corazón. Os Amo. 7:16 p.m.