Mensaje del 24 de Junio de 2016. 3:33 am

Misericordia Señor; Oh Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo; Ten Piedad, Oh Cordero Santo que te entregaste por los hombres; Ten Piedad; Oh Cordero Precioso que a diario sangras por el Amor a los hombres; Ten Piedad. Adoradle y Escuchadle en el Corazón con Amor.

Hijita de Mi Corazón, la carga del pecado es Cruel, Dolorosa y hace Sangrar Mi Corazón; por ello Os pido, debéis todos atesorar muchas riquezas de Amor en vuestros Corazones, para que, cuando Os llame Mi Padre celestial, tengáis Tesoros en vuestro Corazón, que el pecado y el enemigo no Os pueda arrebatar.

Debéis todos esforzaros por alejarse del pecado y obrar con Amor en todas las escenas de vuestra vida; pero no con amores superficiales como los de la Tierra; sino con verdadero Amor como el Amor de Mi Madre en el SI de la entrega y como el Amor de Mi Sacrificio en el SI de la Cruz.

Hijitos míos no atesoréis riquezas del mundo materiales, ellas no Os llevarán a Mí, ni Os alimentarán ante Mi presencia, trabajad día tras día por la entrega constante en el Sí del Amor para el Señor.

Si vuestro Corazón dice Sí; entonces podréis disponer con Amor vuestro Corazón para escuchar la voz de Mi Amor y caminar en pos de la voluntad Divina de Mi Padre celestial; Sí a la Entrega, Sí a la Obediencia, Si a la Paz, Sí a la Reconciliación, Sí a la Caridad, Sí a la Paciencia, Sí en la Fe y la Esperanza, Sí en la Perseverancia, Si en el Amor, Sí en el Sacrificio, Sí en la Humildad y en la Sencillez, Sí en la Prudencia y el silencio, Sí en el Ofrecimiento de lo que sois y tenéis porque todo es del Padre Eterno; Sí en el Sí de MI Madre y en el Sí de Mi Cruz.

Ofreced a Dios Padre vuestro Sí,  enmarcado y envuelto en estos Si de Amor, que como mariposa se cobijan en cada uno de vosotros para entregar con Amor al Padre.

Mis hijitos, regresad al Sí y entregadme vuestras vidas en señal de abandono en Dios. Os espero cada día para apaciguar en Mí Corazón el dolor que me causa el pecado de ésta humanidad agobiada y doliente.

Como nunca antes Os llamo hijitos; es urgente vuestra conversión, vuestro Sí, vuestro Amor. Yo Os aliviaré si Os acercáis a Mí, pero no podré hacer nada por vosotros si permanecéis herméticos a Mi Amor y alejados de Mi Corazón.

Acompañadme hijita, por todos aquellos que en sus inseguridades no buscan refugio en Mi Amor, sino que ponen sus miradas en dioses falsos esperando del mundo lo que Yo desde el Cielo, solo Yo les puedo otorgar, y suplicad por todos aquellos que aun pronunciando Mi nombre no conocen Mi Amor y aún no me han dicho SI para transformar sus vidas en veleros del Amor.

Orad junto a Mi Corazón unidos al Corazón de Mi Adorada y Dulce Madre que con Amor nos acompaña en esta hora de dolor. 3:53 am