Escribirás en obediencia al Padre, tal como se te muestra y se hace sentir en vuestro corazón.
“El Cielo se viste de fiesta, Engalardonado de Estrellas bajo el Manto Purpura de Amor que une el Cielo con la Tierra desde el Seno Materno de María y que se consume en Pan de Vida, Cuerpo y Sangre de Redención y Amor para los hombres”
“El Cielo se enaltece en esta fiesta de Vida y Eterna Gloria por la Unión de la Divinidad como Presencia Viva que resuena en la Tierra bajo el lecho que en Gloria se posa para el Renacer del Hombre hecho Dios y el Dios hecho hombre”
“El Cielo se goza y se colma de dicha aún y a pesar del Desamor de los hombres; por la Magnificencia de la Eternidad en la Trinitaria Unión del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo como Única Fuente de Salvación, no sólo en la liberación del pecado sino en la esperada Vida Eterna, junto al Amor Único y Verdadero del Creador”
“El Cielo Majestuoso y lleno de esplendor Brilla con Luz Insondable, que a la luz de los hombres no existe, más que inunda cada rincón de cada corazón que acepta esta hermosa y sublime Oblación”
“El Cielo se corona en Hermosura y Santidad, en Alabanza y en Pleno Honor, como un grito de júbilo que sólo se escucha en el Silencio del Corazón, más que aturde en Excelsa Felicidad de quienes gozan de la Presencia Eterna de Dios y que conmueve en Dolor, Esperanza y Anhelos de Amor, de quienes permanecen en el Purgatorio, apacentando el día del nuevo y eterno Encuentro con el Cordelo del Amor”
“El Cielo niña, se Postra, Adora y Exalta la Obra del Amor del Padre en María y con suave canto de los Ángeles Glorifica la Tierra por el Niño Jesús, que viene colmado de Dulce y Eterna Divinidad en el Reinado y el Amor de Dios”
“El Cielo niña, acompaña junto a los corazones de buena voluntad esta entrega, esta espera y este recibimiento rebosante de Amor”
El Cielo contempla vuestros corazones y los une en un lazo irrompible de Fuerza, Fe y Esperanza, bajo el Manto Maternal de María y en Comunión al Cordero Vivo del Amor”
“El Cielo niña, recibe vuestros corazones, aquellos verdaderamente dispuestos a la eterna y esperada felicidad en Dios”
El Cielo Os Otorga la Paz, la Paz del Señor. 5:52 p.m.