Mensaje del 22 de agosto de 2018. 5:40 pm Santísimo

Como Reina del Amor y Madre de los Dolores, suplico una vez más por la conversión de los hombres, en este desierto en que se ha convertido la tierra,

en este y por este valle de lágrimas bajo el cual se desborda la Misericordia del Padre y la cual los hombres desprecian con sus abominables gustos y modas.

Os digo hijos Míos, nada Os llevara a la felicidad más que Mi Hijo Jesús, y nada en la tierra Os otorgará aquella paz y alegría que buscáis en el mundo bajo las trampas de Satanás. No Os habéis encarnecido con el mal; pues bien, Yo como Madre Os digo, Si lo habéis hecho, porque habéis cambiado la siembra de frutos buenos para Dios, en madrigueras de pecado, y así mismo hijos Míos, seréis juzgados ante la presencia del Padre.

Vuestros corazones están tan distantes de Verdadero Amor, que no Os dais cuenta de los pasos que en falso dais cada día hacia el abismo, faltando a la caridad de tantas y tan horrendas maneras; pues bien, Yo Os llamo, y grito con Dulzura y con Justicia en Mi Autoridad de Madre, a todos aquellos corazones que caminan hacia los brazos de Mi Hijo por Mi Amor, y a todos aquellos que se ofrecen almas victimas por la salvación de sus hermanos, por la conversión de las almas de todos los pecadores y por la unión al Dolor del Corazón de Mi Hijo y de Mi propio Corazón.

Cuanto Os Amo y ruego desde Mi Corazón de Madre, por vuestra perseverancia, para que ahondéis en vuestros corazones y contempléis la Gloria de la Eternidad que Os espera, desde ya, por la entrega y el sacrificio que ofrecéis en la tierra para la purificación del mundo.

Este hija Mía, es un pequeño fragmento de Mi Amor por vosotros, siervos de Amor, y por ello, viendo agonizar el mundo y sintiendo tantas almas lejos del Verdadero Amor, Os cobijo, y acudo a vuestra oración, para que Os dispongáis con amor encendido y con corazón dispuesto al servicio de la súplica y la reparación de muchos, muchos corazones.

Guardad entonces niña en tu corazón Mi Amor cada día, y mantente fiel al Amor de Mi Hijo, en la compañía, la obediencia y el silencio que se Os ha pedido para el servicio del Amor.

Multiplicad ahora estas palabras y entregadlas a Mi Hijo en el Altar, para que muchos corazones en el mundo, regresen como el hijo prodigo a la casa del Padre en esta fiesta de Mi Amor.

La Paz de Mi Corazón aguarda también con Ternura y Amor tu Corazón. Os Amo niña del corazón de Mi Hijo Jesús. 5:56 pm