Mensaje del 19 de abril de 2019. Santo Sepulcro 4:55 pm

Niña del corazón de Mi Hijo Jesús, en esta tarde de desolación y desamor, Mi Corazón de Madre te hablan, para agudizar en tu corazón de hija, el Dolor del Amor; pues bien hijita: No solo es el Dolor encarnecido de una Muerte en Cruz que traspaso Mi Alma e inundo Mi Corazón de Sufrimiento, ni la desolación del Cuerpo Ultrajado y Maltratado de Mi Hijo que con su padecimiento estremeció Mis Entrañas, como Espinas y Clavos sembrados en Mi Propio Corazón; es entonces hija Mía, el camino y el recorrido de Dolor que aún y con mayor arraigo Crucifica el Amor de Mi Hijo con el estado de tantas y tantas almas abatidas y dominadas por el Pecado y bajo las cuales, la Blasfemia, el Ultraje, el Maltrato, la Negación, el Irrespeto, la Irreverencia, la Frialdad, la Desobediencia, la Maldad, con tantas otras formas de iniquidad, siguen hiriendo el Verdadero Amor, negando la Cruz en la Redención y dejando que el Enemigo domine por completo la voluntad en muchos hombres.

Esta tarde de Silencio y Entrega en el Dolor, es una respuesta tardía en la nobleza, Si hijos, porque el tiempo pasa y siempre Os llama, más cada vez, estáis despojando con mayor rapidez el Amor, y Os tardáis en regresar a enmendar vuestra indiferencia.

Esta, hija Mía, es la muestra del desagradecimiento de los hombres al Padre y de la Soberbia hecha carne para enjuiciar el Verdadero Amor; esta hija Mía, es la mayor prueba de Dolor para el Corazón del Padre en el Hijo, y para Mi Corazón de Madre, que entrega TODO como Madre Corredentora por vosotros en la Salvación Eterna del Cordero del Amor.

Esta Hija Mía, es la Soledad del Alma, en el Vacío del Espíritu por haberos negado al Amor tantas veces y de tantas maneras. Acoge hoy hija Mía, no solo Mi Corazón quebrantado en el Dolor, sino la compañía en el silencio al Amor de los Amores en su Sepulcro de Amor; este Sepulcro, que El, Mi Hijo Jesús se complace en vivir y entregar por muchas almas, para ser Redimidas para la Vida Eterna, éste Sepulcro, que como Manso Hombre y con Humildad de Corazón, Mi Hijo entrega al Padre por vuestra Salvación, haciéndose El Mismo, Oblación para el Mundo, en la esencia misma del Alma que quiere caminar hacia la Casa del Padre, cuánto amáis hijos Míos ahora en vuestro caminar y cuanto estáis dispuestos a despojar para sumergiros junto a Mi Hijo en esta tarde bajo el Sepulcro del Dolor y en reparación de Su Propio Amor, cuánto acogéis en vuestra plegaria, para ser vosotros hijos de la Verdad en el Dolor; Pues Yo como Madre Os digo: No bastan las lágrimas más que la enmienda, y por ello Os llamo a purificar y a enmendar vuestro corazón, porque estáis cada día hijos Míos, como lápidas vivientes acrecentando el desamor y desojando el Árbol de la Cruz con vuestros pecados, ahora Os digo: Mirad el Árbol de la Cruz, en el que fueron clavados vuestros propios pecados, sumergiendo el Amor en la Sangre del Rey, el Rey que se Os otorgó como Salvador y que vuestros corazones siguen despreciando como vástagos y crueles negadores de la Verdad. Mi Corazón esta triste al punto de Morir con Mi Hijo y Mi Alma Desolada con tanta Indiferencia de vosotros en la Tierra, mirad que la espada traspaso Mi Alma y ahora solo espera por la Redención, el Abandono y la Entrega de vuestros corazones de hijos.

Sed hija Mía, fuente de Amor y mantened firme vuestro corazón al Amor, para que no desfallezca nunca la Obra de Amor del Padre en tu corazón, y así, cuando seáis llamada ante la Presencia del Padre, puedas entregar tus manos con frutos del Verdadero Amor de Mi Hijo Jesús en tu Corazón. Os Amo. Tu Madre María. 5:15 pm.