Mensaje del 17 de octubre de 2018. 4:45 am

Escribirás una vez más hija Mía, escribirás cuan dolido esta Mi Corazón, por la inmoralidad, la desolación, el desamor, el enmudecimiento y la frialdad de muchos que dicen servirme

y que se mofan de obrar en caridad, verdad y amor, y verdaderamente son huecos a Mi Amor, porque el mundo ha endulzado y encaramelizado sus vidas con el ego y se ha encargado de tergiversar el verdadero servicio a Mi Amor.

Si hija Mía, el servicio en la obediencia, en la humildad, en el silencio y la prudencia, el servicio de una Iglesia Consagrada para la Honra de Mi Corazón como Cordero Inmolado en Reparación del Pecado; pues bien hijita, Yo Os digo, el tiempo de la iniquidad es ahora, el tiempo de la blasfemia y la apostasía, ha llegado la ramera y se ha despojado del Verdadero Amor para inmolar la maldad entre vosotros; es la hora de la Soberbia con ansias de Poder, que impone bajo lobos disfrazados de ovejas la abominación de Mis Altares. Hijos Míos, estad atentos y manteneos firmes, porque solo en la prueba se conoce al hijo y sólo por vuestros frutos se conocerán vuestros corazones.

Abrid entonces hijos Míos vuestra mirada interior a la Verdad que Soy Yo Mismo, y que Os he enseñado la Doctrina del Amor y de la entrega única, fiel y verdadera hacia Mi Padre.

Abrid vuestros ojos del alma y cuidad no solo vuestros actos, sino vuestro corazón, porque en la obediencia a Mi Amor se une la Trinidad Sacrosanta del Dios Vivo en el Espíritu Santo y sólo por Ella tendréis el discernimiento para obedecer en la Tradición de Mi Amor a Mi Corazón y no al querer y a la voluntad de los hombres, que fácilmente son corruptibles por el mal y que ahondan en el Poder para manipular con su astucia y confundir Mi Rebaño.

Hijitos de Mi Amor, ¿hasta cuándo?, acaso las señales del Cielo en este tiempo de purificación no Os han dejado ver, acaso las palabras de Mi Madre y de Mi Propio Corazón reveladas en el tiempo, no Os han dejado ver, acaso la Misericordia de Mi Padre no se ha derramado en la Tierra en señal de advertencia, de amor, arrepentimiento y de llamado a la conversión.

Hijitos Míos, caminad hacia Mí y avanzad sin vacilar escuchando Mi Voz, porque Yo a cada uno Os llamo, os hablo al corazón, a cada uno de Mis Hijos Os animo y Os espero y junto a Mi permanece Mi Madre, que cobija vuestros corazones para prepararos en el camino y llevaros hacia Mi.

Yo Os digo una vez más, Mi Corazón Dolido, se desborda en Lágrimas de Sangre por Amor a vosotros, más en este tiempo hijos en que se acerca la prueba más dura para la tierra, Yo Os digo, El Cordero se desangra herido, humillado y ultrajado, en espera de vuestro amor, y la Mano de la Justicia de Mi Padre no tardará en elevarse para reclamar a esta humanidad que ha despreciado Su Amor en Mi Amor.

No tardéis en regresar hijos, y en vuestro regreso clamad porque muchos conviertan sus corazones de Piedra en Dadivas de Amor para Mi Padre, porque la hora llega hijos y la humanidad entera dormida permanece.

Os Amo y bajo la Soledad y desolación de Mi Corazón unido al Dolor de Mi Madre, Os espero, venid a Mi ahora mismo, todos los que estéis cansados y agobiados, venid a MI, aliviad con verdadero amor Mi Corazón, que Yo Os aliviare con el Eterno Amor Vivo y verdadero de Mi Corazón.

Gracias hija Mía, por responder a Mi llamado y escuchar las palabras de Mi Corazón. La Paz de Mi Amor te acompaña. 5:11 am