Escribe hija, lo que te he revelado con tanto amor durante todo éste tiempo mi niña, es la verdad de Mi Padre en Mi propio Corazón, y hoy en este nuevo amanecer, he querido deciros que te Amo, Te amo tanto niña mía que quisiera permitiros muchas más gracias de Amor, pero nada se obrara sin la voluntad de Mi Padre Eterno y solo Él te dará en la medida en la que lo merezcas; por ello hija mía continuad en la fe, en la docilidad del Alma y en la humildad de vuestro Corazón.
Cada aurora en tu invocación al Espíritu Santo antes de escribir los deseos de Mi Corazón, han brotado unos destellos de luz que reposan directamente en tu corazón para conocer mis deseos; en ellos también está Mi Madre, tierna, solemne y amorosa Madre, que también te Ama y aboga por ti; es apacible el Corazón dispuesto hijita, mantenedlo firme en Mi Amor, permaneced en Mi Amor.
Por ello hijita, hoy quiero daros mi sexta plegaria en la obra del amor por la misión que Os ha sido encomendada por toda la humanidad y que en obediencia debes realizar.
Quiero en el deseo más profundo de Mi Corazón que elevéis ante el Altar de Mi Madre vuestra plegaria por todas las Almas que en su ignorancia, confusión, desobediencia, obstinación, curiosidad o por su propio querer han abandonado mi barca de la iglesia y sus corazones no son guiados por Mi verdadero Amor; sino que son engañados por el enemigo, para negar con sus obras la verdad de mis enseñanzas en la edificación de Pedro como Pastor de la Iglesia Católica, Iglesia Apostólica de Amor.
La ceguedad de éstas ovejas del rebaño, las ha apartado de Mi Amor, son gran parte de mis ovejas perdidas en el Redil del Amor, debéis suplicar por ellas hija mía y tu suplica dirá:
“Padre Eterno, Misericordioso, Dulce y Bueno, por intercesión del Inmaculado Corazón de María, a los pies de la Cruz de Tu Amadísimo Hijo Jesucristo, te traigo todas las ovejas del redil que han abandonado la barca de Pedro y que sucumben en la ceguedad por la negación propia de la verdad y del Amor. Tú has dicho, “Yo Soy el que Soy, nadie va al Padre sino por Mi”, y para llegar a Ti, vuestra Madre María nos guía con Amor, sin ella nuestro Amor es vano.
Te suplico por los méritos de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús que perdonéis su infidelidad y que en su corazón de la mano de nuestra Consoladora y Tierna Madre, enciendas la llama del Amor para que en brazos del mismo Jesús regresen al rebaño de Tu Eterno y Misericordioso Corazón.
Obrad en ellos, el ver y creer en el Único y Verdadero Amor, depositado en la Encarnación de la Santísima Virgen; engendrado en la obra Salvífica de Jesús; en la Palabra que es la Verdad, la Verdad que eres Tú; en la exaltación de la Santa Cruz; en la Ascensión del Mayor Amor a los Cielos siendo tres personas en una “Padre, Hijo y Espíritu Santo” para la Glorificación Eterna del Padre, en la Coronación de nuestra Amada Madre como Reina Universal de Todo lo Creado y en cada regalo de Misericordia, Bondad y Piedad que has otorgado a la humanidad entera. Amén”.
Este es mi querer hija mía, acompañadme en ésta aurora en ésta suplica de amor junto al Corazón de Mi Adorada Madre que Os espera como Os espera Mi Corazón. 4:04 am.
MI AMADO JESÚS