Escribe hijita de Mí Corazón, en la sombra de la realeza se refleja la grandeza de la Fuerza del Padre como lo habéis sentido en vuestras manos esta madrugada, la fuerza que con tanta inspiración y Amor no cabe en las manos de ningún hombre y que se ha resistido a desatarse en la Tierra con la magnitud en que merecen los pecados de la humanidad; por ello hijita, necesita el mundo mucha oración por la conversión de las almas, porque el pecado aflora como Os he advertido desatando la furia de satanás en la atrocidad e impiedad más devastadora antes vista en la Tierra.
El Amor de Mi Padre es indescriptible en palabras humanas, pero así mismo es Su Poder y su fuerza. Yo Os pido, regocijaos en el Amor conmigo por cada alma que en el Espíritu vuelve a Mi Corazón y confiad hijita que si me la entregáis en el Altar de Mi Consagración ellas se convertirán.
Os pido perseverancia en la oración, en la compañía de los dolores de Mi Corazón y los dolores de Mi hermosa Madre, Os pido que se mantengan unidos junto con Mis elegidos en la fraternidad del Amor, y Os ruego, que veléis por el mundo porque se aproxima el llamado en las conciencias y debéis estar preparados.
Manteneos vigilantes, guardad la prudencia en el silencio y ofreced vuestros sacrificios de ayuno y oración por Mí Segunda Venida al mundo; solo con estos gestos de reparación y de contemplación se apacigua la Ira de Mi Padre. Cómo Os quisiera no pasarais por esta prueba; por favor hijitos velad junto con Mi Corazón y unid vuestras intenciones al corazón Inmaculado de Mi Madre que día a día intercede por vosotros; quiero que acompañéis Mi dolor en la Cruz por el pecado que está desatando la soberbia de satanás en el mundo, porque su potestad destruye sin piedad la conciencia del hombre y devasta con su maldad lo que se atraviese en su camino y muchos de Mis hijos están dominados por ésta misma soberbia de supremacía y poder aniquilador de Almas.
Si vuestros corazones se doblegan al mal, como esperáis recibir compasión ante el castigo. Ay de este pueblo corrupto que ha abandonado su primer y único Amor, como queréis sobrevivir y llegar a la Eternidad con vuestras manos manchadas de tanta sangre inocente ofrecida al príncipe de las tinieblas; como no queréis pues vivir entre las tinieblas. Entre ellas estáis oh Tierra entera; preparaos porque se aproxima vuestra purificación y cuando se desate nada ni nadie detendrá la ira de Mi Padre.
Uníos conmigo en la plegaria por la conversión de las almas para que no perezcáis en la hora de la tribulación; por favor hijitos no desfallezcan en la oración. Acompañadme hijita con las rosas de Mi Madre en esta súplica de reparación por el abandono y maltrato a vuestro único y primer Amor. 3:55 a.m.